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“Que por nuestra raza siga hablando su espíritu por muchos años", dijo Enrique Graue, rector de la Universidad Nacional Autónoma de México, dirigiéndose al historiador y filósofo Miguel León-Portilla, quien el día de ayer llegó a los 90 años de edad.

“La verdad mi vida ha sido muy feliz. Estoy en paz con la vida, ha sido generosa conmigo”, dijo durante su discurso. “Mi vida ha sido una serie de novedades para mí”. Acompañado por universitarios, académicos, funcionarios y ex rectores, el historiador e investigador emérito don Miguel León-Portilla agradeció a la universidad, y a quienes fueron sus maestros, además de a su esposa y a sus colegas.

Después de los discursos de inauguración, el homenaje siguió con dos mesas en las que se revisaron las distintas facetas de León-Portilla, desde historiador a nahuatlato, humanista, editor, escritor, maestro y filósofo, en voz de especialistas como Eduardo Matos Moctezuma, Rodrigo Martínez Baracs, Patrick Johansson, y Juliana González.

“Para mí es un día que seguramente será inolvidable entre los muchos, espero, que tenga todavía… Antes que nada, voy a agradecerle a nuestra Universidad. En ella tuve maestros excepcionales como Ángel María Garibay, quien me encaminó y gracias a él pude hacer muchas cosas…”

A este homenaje fue convocado Jaime Labastida, director de la Academia Mexicana de la Lengua, además de Ana Carolina Ibarra, directora del Instituto de Investigaciones Históricas; María Teresa Franco, directora del Instituto Nacional de Antropología e Historia; y Andrés Lira, director de la Academia Mexicana de la Historia.