Este es un ensayo sobre la historia del español en sus trazos mayores, conducido por el afecto hacia lo que somos en, con y por la lengua. Cargado de porvenir, su discursiva insiste en entender el pasado de la lengua española como una apoyatura de fecundas reflexiones sobre lo que vendrá pues conduce el memorial de la lengua desde ese pasado recuperable hasta un presente vivo que promueve un futuro de vértigo, en números de entidad e identidad.