Mentiras transparentes: "Remedios", de Felipe Garrido

Domingo, 15 de Febrero de 2015

Felipe Garrido
Foto: Jorge Dávila, Icoavs, AML

A nadie le sorprendió que Remedios se suicidara. Un desastre era su vida. La mayor de siete hijos, sufrió siempre los celos de la madre, que se sentía desplazada por ella, y los celos del padre, rijoso y autoritario. Las hermanas se fueron casando, los hermanos fueron escapando, y Remedios se fue quedando al cuidado de los viejos, que seguían imponiéndole su voluntad. ¡Cállate!, gritaba la madre cuando Remedios cantaba. ¡Mi desayuno, a qué horas piensas traérmelo!, gritaba el padre desde la cama. Remedios volvió a ver a sus hermanos, por unos minutos, en el velorio de la madre. Con algunos no había hablado en años. El padre siguió gritando por las mañanas, y comenzó a acosarla. Alguna vez consiguió meterle mano. A nadie le sorprendió que se colgara. Ni que lo hiciera allí, en el enorme vestíbulo, donde fue lo primero que su padre vio por la mañana, al salir de su recámara, enfurecido porque Remedios no llegaba con el pan, con la taza de café.
Para leer la nota original, visite: http://www.jornada.unam.mx/2015/02/15/sem-garrido.html


Comparte esta noticia

La publicación de este sitio electrónico es posible gracias al apoyo de:

Donceles #66,
Centro Histórico,
alcaldía Cuauhtémoc,
Ciudad de México,
06010.

(+52)55 5208 2526
Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo. 

® 2024 Academia Mexicana de la Lengua