Con el mismo sentido del refrán anterior del que, sin embargo, no se puede considerar una variante por estar basado en una imagen distinta, este refrán popular expresa, en forma de una norma, que es mejor una advertencia oportuna que muchas correcciones después. Se atiene también al tópico de que "vale más prevenir que remediar" o lamentar como el refrán emparentado "más vale dar un grito a tiempo que cien después".