Refrán popular que, tomando como indicador la comida, insta a los de clase social baja _los que comen frijoles_ a no comportarse como si fueran de la clase social de más arriba _de los que comen jamón_. Este refrán supone por parte del refranero una clasificación de las comidas según las clases sociales. El refranero mexicano, además, tiene una escala en las comidas mismas: la clase mínima de ellas es el taco de sal. Variante: "comer frijol y eructar pollo".