Dicho popular fanfarrón y baladrero, de tipo exclamativo, que se usa como respuesta para cortar de tajo, irónicamente, las bravatas, baladros y excesos de jactancia y presunción de alguien. El dicho funciona como una reacción y respuesta, igualmente excesiva, a las exageraciones que la motivaron: el mar me parece chico para un buche. Variantes: "chiquito se me hace el mar, para hacer un buche de agua" (F. 66 y 70); "me parece chico el mar, para hacer un buche de agua" (F. 113 y 116); "poco se me hace el mar, para hacer un buche de agua" (F. 132); "se me hace chico el mar, para hacer un buche de agua" (F. 37, 90 y 122); "se me hace chiquito el mar, para hacer un buche de agua" (F. 12); "se me hace poco el mar" (F. 37).