Refrán popular de tipo étnico que expresa claramente lo que enuncia: no te fíes de falsificaciones. Circula también en otras versiones más largas alguna de las cuales dice así: "no te fíes de indio barbón, ni de gachupín lampiño, de mujer que hable como hombre, de hombre que hable como niño" (F. 5). Otra de ellas, en cambio, dice así: "no te fíes de indio barbón, ni de gachupín lampiño, de mujer que hable como hombre, de hombre que hable como niño, ni mujer con vozarrón" (F. 5). Y otra: "no te fíes de indio barbón, ni de gachupín lampiño, de mujer que hable como hombre y de hombre que hable como niño" (F. 90). El refrán y sus variantes consideran a todos estos personajes como falsificaciones.