Refrán popular que en forma de una declaración sentenciosa expresa lo que dice. Se refiere a los individuos o empresas que fraudulentamente se declaran en quiebra para resolver sus deudas. El refrán consiste en un ingenioso juego de palabras que toma el vocablo "quebrado" tanto en el sentido aritmético del número, que expresa una fracción decimal y que se representa mediante dos cantidades separadas por una raya, como del empresario en quiebra. El refrán empieza refiriéndose a estos últimos quebrados y termina hablando de los otros, de los números quebrados que se oponen a los enteros.