Refrán equivalente a "alazán tostado, siempre colgado" (F. 90 y 116), que significa, en efecto, que el caballo alazán por ser tan bueno debe estar siempre ensillado. Como ese refrán, es formalmente también una sentencia apodíctica estructurada en dos hemistiquios rimados. También se conoce en la siguiente variante: "alazán tostado, tenlo siempre ensillado". (F. 48, 50 y 131).