Refrán del ámbito pulquero que significa, según Rubio, "que cuando una persona dice lo contrario de lo que quiere decir y lo dicho puede ser o una burla o algo que se presta a una interpretación torcida, a esa persona hay que insultarla en forma verdaderamente cruel". Es decir, hay que "mentarle la madre", dice el dicho. Variante: "a quien te hable en pulquería, recuerdos a la familia" (F. 116 y 122).