Refrán popular que significa lo que enuncia. Se atiene al tópico de que la deuda contraída es proporcional al beneficio comprado. A decir de Rubio, "qué menos puede hacer aquel a quien únicamente le dan a oler la comida que corresponder con sólo sonar el dinero con que debía pagarla". El refrán, de forma sentenciosa, tiene la estructura, tradicional en los refranero hispánicos, del mal remedio que se atiene a la fórmula, como se sabe, "a o para ésto, ésto otro". Hay rima consonante entre el primero y segundo hemistiquios.