para la querencia, no hay burro flojo
para la rata, el ratón
para la yerba, la contrayerba
para las criadas del cura no hay infierno
para lazar y no mancar, ni una ni más de dos amarrar
para los extraños, la fianza, y para los de casa, la confianza
para los tarugos siempre es día de San Bartolo
para mí, alazán hormiga, dígase lo que se diga
para morirse, nacer, estornudar y calzonear, no se puede uno esperar