hay potros que saltan las trancas, aunque se les claven las púas
hay que aprender a perder, antes de saber jugar
hay que estar cerca del que paga y lejos del que manda
hay que estirar los pies hasta donde abarque la cobija
hay que perdonar el pasado, para disfrutar el presente
hay que ser franco, pero no tanto
hay que ser león y zorra
hay que vivir feliz, como el juil en el arroyo
hay quien cree que ha madrugado, y sale al oscurecer