en las angustias, caricias
en las horas de trabajo, los amigos al carajo
en las manos del pobre, la plata se vuelve cobre
en lo ajeno cae la desgracia
en lo más seguro hay riesgo
en manos de los pendejos, la pólvora está mojada
en manos de un buen ordeñador, ni los calostros quedan
en Querétaro, al poblano bien puedes darle la mano
en robo y en quemazón, no hay pagazón