Basic HTML Version
Alfonso Reyes anduvo cargando a lo largo de muchos años el recuerdo
sangrentado de la muerte de su padre, el general Bernardo Reyes, la mañ
del domingo 9 de febrero ante la puerta Mariana. Esta memoria, rum
como un amargo pienso a lo largo de las décadas, se le transforma a R
en una materia del sentido que, más allá de la circunstancia personal y
tragedia familiar y civil, se alza como un destino de su propia avasalla
vocación poética y literaria. Vocación no política ni partidaria, la artís
y contemplativa de Reyes se alimenta de la historia, pero en última ins
cia la sabotea, pues sabe demasiado bien que su carro sólo es –como e
cuadro de Brueghel– un carretón de paja y que en ella no hay lugar ni
la trascendencia poética ni para lo sagrado. Él sabe demasiado bien q
materia del sentido es ante todo materia de lo sagrado, es decir materia
tica. Y que al romperse el techo de la casa queda expuesto a la intemp
y a lo sagrado y –en cierto sentido– queda salvado, el orden mágico de
casa avasallada por la historia.
“La pérdida de la Mansión Dorada. Notas sobre un poema olvid
de Alfonso Reyes” es, más que un ejercicio, un ensayo de restitución
homenaje a lo que podría llamarse la responsabilidad intelectual del p
Alfonso Reyes, de quien el joven Rangel Guerra fue amigo desde los a
cincuenta, como consta por las diversas menciones que hace de él e
Diario
. Como acabamos de escuchar, el poema “Noche de consejo”, fe
do en México en abril de 1913, fue la primera o una de las primeras c
que escribiría el joven Alfonso, unas cuantas semanas después de la mu
de su padre, acaecida en la mañana del domingo 9 de febrero de 1
fecha en que se inicia la llamada Decena Trágica.
La exégesis, comentario y paráfrasis que hace Rangel Guerra de las
estrofas –dos de 14 y una de 12 versos– de los 40 octosílabos que cont
el texto, ayudan a despejar y a situar el contenido y la sustancia enig
cos del poema. En la edición de
Huellas
(1922)
4
“Noche de consejo” l
una indicación, bajo el título y entre paréntesis: “
(En sordina)
” que
4
Alfonso Reyes,
Huellas 1906-1919
, Editorial Andrés Botas e Hijo, México, 1922, 195 pp