Nació el 3 de octubre de 1941 en Pachuca Hidalgo y murió el 16 de octubre de 2011 en la Ciudad de México. Ingresó a la Academia como miembro de número el 14 de mayo de 2008. Fue el 3° ocupante de la silla número XXIX.
Estudió Derecho en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México. Más tarde, estudió Periodismo en la Escuela Nacional de Ciencias Políticas y Sociales (actualmente Facultad). Posteriormente, hizo un doctorado en Historia en la Universidad Iberoamericana.
En el ámbito de la docencia ejerció como profesor en numerosas instituciones. Fue profesor en la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM, en la Escuela Nacional de Estudios Profesionales Acatlán UNAM, también fue profesor en la Universidad Iberoamericana y en la escuela de periodismo Carlos Septién García. En cuanto a actividades relacionadas con la educación fungió como secretario del Consejo Ténico, jefe del Departamento de Educación y Comunicación, jefe de la Unidad de extensión académica y universitaria de la ENEP Acatlán. Fue también presidente de la Junta de gobierno del Colegio Madrid y Tesorero de la Fundación SNTE para la cultura del maestro mexicano.
Por otro lado, realizó actividades relacionadas con los medios de comunicación. Fue reportero del semanario Crucero, fue jefe de redacción y subdirector de la agencia periodística Informac y de Excélsior, entre otras actividades. Colaboró también en los diarios Últimas Noticias, Excélsior, El Universal, Cine Mundial, Unomásuno, La Jornada, El Financiero, El Norte, Reforma, etc. Participó en emisiones radiofónicas como Opinión Pública, Onda Política y Monitor. Fue conductor en Canal Once y del programa Plaza pública de Radio UNAM.
Fue autor de obras como: Vicente García Torres, monitor de la república (1967), Excélsior y otros temas de comunicación (1980), Examen de la comunicación en México (1980), La reforma política (1981), La banca nuestra de cada día (1982), Alfonso Cravioto, un liberal hidalguense (1984), Votar, ¿para qué? (1985), Comunicación y política (1986) ¡Nava sí, Zapata no! (1992), ¡Escuche, Carlos Salinas! (1996), El siglo de Fidel (1996), Vivir en San Lázaro (1998), Constancia hidalguense (1999), Tiempo de Ruptura. La coalición Elviazul (2004).
Gracias a su arduo trabajo y gran trayectoria fue reconocido con diversas distinciones como el Premio José Joaquín Fernández de Lizardi otorgado por el Club de periodistas de México (1978), el Premio Nacional de Periodismo (1981), fue nombrado Caballero de la Orden del Mérito por la República Francesa (1981). Recibió el Premio Manuel Buendía a la trayectoria periodística (1987) y el Premio al periodismo político por el Colegio Nacional de Ciencias Políticas y Administración Pública (1989).
